tiramisú de fresas y chocolate blanco

Tiramisú de fresas y chocolate blanco: una receta deliciosa

El tiramisú de fresas y chocolate blanco es una versión fresca y ligera de un clásico italiano que nunca pasa de moda. En esta receta, las fresas de Cuna de Platero se combinan perfectamente con el suave sabor del chocolate blanco, creando un postre irresistible. Además, es una opción más saludable que las versiones tradicionales, ideal para aquellos que buscan disfrutar de un dulce sin renunciar a los beneficios de los ingredientes frescos y naturales.

Este tiramisú no solo es delicioso, sino también fácil de hacer. La combinación de capas cremosas de mascarpone y chocolate blanco con el toque fresco de las fresas hace que este postre sea perfecto para cualquier ocasión. Con ingredientes simples y nutritivos, es una receta que puede convertirse en tu nueva favorita. ¡Te sorprenderá lo bien que se lleva el sabor de las fresas con el chocolate blanco!

Ingredientes

  • 250 g de fresas de Cuna de Platero, lavadas y cortadas en rodajas.
  • 200 g de queso mascarpone.
  • 100 g de chocolate blanco, derretido.
  • 2 cucharadas de azúcar
  • 250 ml de nata para montar.
  • 1 paquete de bizcochos de soletilla.
  • 150 ml de café (puedes sustituirlo por leche si prefieres una versión sin café).
  • Unas gotas de esencia de vainilla (opcional).

Paso a paso para este tiramisú

El proceso para preparar este tiramisú de fresas y chocolate blanco es sencillo y muy satisfactorio. Con unos pocos ingredientes y unos pasos fáciles de seguir, podrás sorprender a tus invitados con un postre delicioso y refrescante. A continuación, te explicamos el paso a paso para lograr una receta que hará que todos quieran repetir.

La clave de este tiramisú está en la combinación de fresas de Cuna de Platero y el suave chocolate blanco. Los ingredientes son fáciles de conseguir, y el resultado es un postre cremoso, ligero y con un toque saludable. ¡Vamos a ver cómo prepararlo!

tiramisú de fresas y chocolate blanco

Paso 1: Preparar los ingredientes

Lo primero que debemos hacer es preparar todos los ingredientes para que el proceso de montaje sea rápido y sencillo. Comienza lavando y cortando las fresas en rodajas finas. Asegúrate de retirar los tallos y cualquier parte dura. Luego, coloca las fresas en un recipiente y resérvalas.

A continuación, derrite el chocolate blanco al baño maría o en el microondas, teniendo cuidado de no sobrecalentarlo. En un bol aparte, bate la nata para montar hasta que esté firme. Para darle un toque extra, puedes añadir unas gotas de esencia de vainilla, que aportará un aroma delicioso a tu tiramisú.

tiramisú de fresas y chocolate blanco

Paso 2: Preparar la crema de mascarpone y chocolate blanco

Una vez que los ingredientes estén listos, es hora de preparar la base cremosa del tiramisú. En un bol grande, mezcla el queso mascarpone con el chocolate blanco derretido hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Si prefieres un toque más dulce, añade las dos cucharadas de azúcar en este paso y mézclalo bien.

Cuando la mezcla esté lista, incorpora la nata montada con movimientos suaves y envolventes. Este paso es importante para que la crema sea ligera y aireada, lo que dará una textura deliciosa a tu tiramisú. Reserva la mezcla en la nevera para que se mantenga fría mientras preparas el siguiente paso.

tiramisú de fresas y chocolate blanco

Paso 3: Montaje del tiramisú

Para montar el tiramisú, empieza sumergiendo los bizcochos de soletilla en el café (o leche si prefieres evitar el café). No los mojes demasiado; solo lo suficiente para que absorban el líquido sin deshacerse. Coloca una capa de bizcochos empapados en el fondo de un recipiente o vasitos individuales.

A continuación, cubre los bizcochos con una capa de la crema de mascarpone y chocolate blanco. Extiende de manera uniforme y asegúrate de que toda la base esté bien cubierta. Luego, agrega una capa de fresas en rodajas por encima, distribuyéndolas de manera que cada bocado tenga un poco de fresa. Repite el proceso hasta que hayas utilizado todos los ingredientes, terminando con una capa de crema.

tiramisú de fresas y chocolate blanco

Paso 4: Dejar reposar y servir

Una vez montado el tiramisú, es importante dejarlo reposar en la nevera durante al menos 4 horas, idealmente toda la noche. Esto permite que los sabores se integren y que la textura sea aún más cremosa. No te olvides de cubrir el tiramisú con film transparente para evitar que se absorban otros olores del frigorífico.

Antes de servir, puedes decorar el tiramisú con algunas fresas adicionales por encima, y si lo deseas, espolvorear un poco de cacao en polvo o chocolate blanco rallado. El resultado será un postre visualmente atractivo y absolutamente delicioso, ideal para cualquier ocasión especial o como un capricho para disfrutar en casa.

Consejos útiles

  • Usa fresas de temporada: Aprovecha las fresas de Cuna de Platero para obtener un sabor más natural y delicioso. Las fresas de temporada no solo son más sabrosas, sino también más nutritivas.
  • No empapes demasiado los bizcochos: Asegúrate de mojar los bizcochos de soletilla en el café o leche solo lo suficiente para que no se deshagan. Si los empapas demasiado, la textura del tiramisú podría volverse demasiado líquida.
  • Prueba con otros tipos de chocolate: Si te apetece experimentar, puedes sustituir el chocolate blanco por chocolate negro o chocolate con leche para darle un toque diferente a la receta. Cada tipo de chocolate aportará un sabor único a tu tiramisú.

Preguntas frecuentes

¿Puedo hacer este tiramisú sin café?

Sí, puedes hacer este tiramisú sin café si prefieres evitarlo. En lugar de café, puedes utilizar leche o zumo de naranja. Esta sustitución cambiará ligeramente el sabor, pero seguirá siendo un postre delicioso y refrescante.

El café añade un toque amargo que contrasta con la dulzura del chocolate blanco, pero puedes optar por algo más suave, como la leche, o incluso una opción cítrica como el jugo de naranja, que aportará frescura a tu receta.

¡Por supuesto! De hecho, te recomendamos preparar este tiramisú con antelación. Dejarlo reposar en la nevera durante al menos 4 horas o, mejor aún, toda la noche, hará que los sabores se mezclen perfectamente y la textura se asiente.

Al reposar, el tiramisú se vuelve más sabroso y su crema se espesa, lo que lo hace aún más delicioso. Además, se conserva bien en la nevera, por lo que es una excelente opción para prepararlo con tiempo antes de una ocasión especial.

Si no encuentras mascarpone, no te preocupes. Puedes sustituirlo por queso crema, que es una alternativa bastante común y se encuentra fácilmente. Aunque el sabor será ligeramente diferente, el resultado seguirá siendo delicioso.

El mascarpone tiene una textura más suave y cremosa, pero el queso crema también aportará una buena consistencia a la mezcla. Si lo prefieres, incluso puedes combinar queso crema con un poco de nata para conseguir una textura más parecida a la del mascarpone.

Conclusión

En resumen, el tiramisú de fresas y chocolate blanco es una receta deliciosa, fácil de hacer y perfecta para cualquier ocasión. Con ingredientes frescos como las fresas de Cuna de Platero y el suave chocolate blanco, este postre es una opción más saludable y ligera que las versiones tradicionales.

Si buscas una receta que combine frescura, sabor y un toque de indulgencia, este tiramisú es la elección perfecta. No solo es un postre atractivo visualmente, sino que también es una opción nutritiva y fácil de preparar. ¡Anímate a probarla y a experimentar con tus propios toques personales para hacerla aún más especial!

Tiempo de preparación: 30’ + 4h en en el frigorífico

Raciones: 6

Calorías por ración: 200 kcal